ESTRUCTURA GENERAL DE UN ESTUDIO DE IMPACTO AMBIENTAL.

 

NOTA: Las referencias que se hacen a lo largo del texto con números son las siguientes:

(1) Gómez Orea, Domingo. "Evaluación del Impacto Ambiental". Ed. Mundi--Prensa y Editorial Agrícola Española, S.A. Madrid. 1999. 1ª edición. Referencia de la biblioteca de Filosofía: FL/TD 194.4. G6.1999.

(2) Conesa Fernández-Vítora, Vicente. "Guía Metodológica para la Evaluación del Impacto Ambiental". Ed. Mundi-Prensa. Madrid. 1997. 3ª edición. Referencia de la biblioteca de Filosofía: FL/ TD 194.6.C66.1997.

 

1. INTRODUCCIÓN.

El primer elemento que define cómo ha de ser la estructura general de un estudio de impacto ambiental (EIA, en adelante) es el objetivo de dicha EIA. Los objetivos fundamentales de cualquier EIA son:

2. ESTRUCTURA DE OPERACIÓN.

A la hora de llevar a cabo un EIA habremos de dar los siguientes pasos:

  1. Decisión de realizar el EIA.

Se trata de "descubrir" la necesidad (en general) de realizar una EIA para nuestro proyecto. En esta decisión intervienen los siguientes factores (situados de mayor a menor importancia porcentual en la decisión de los agentes que intervienen a la hora de realizar la EIA): 

(b) Reunión del grupo de trabajo multidisciplinar que va a afrontar el EIA.

 El coordinador ha de ser capaz de definir la tipología de actividades a analizar, el ámbito territorial (escala del análisis, delimitación territorial, etc.), y enfoque del EIA, así como de coordinar a todos los elementos humanos que participen en el mismo para lograr los objetivos de éste (para más información acerca del coordinador-jefe de proyecto, ver "la muy importante contribución" del "muy importante jefe de proyectos" en la "muy importante asignatura de Organización y Gestión de Proyectos").

  1. Estructura metodológica de un EIA.
  2. Una vez tomada la decisión de realizar el proyecto se pasa a la fase de recogida de información acerca del proyecto y del medio afectado (encontrar factores a analizar y definir el ámbito de trabajo con precisión). Posteriormente se procede a la valoración del inventario realizado y al cruce de impactos con elementos del MA implicados (matrices).

    Si se trata de un proyecto en el que existen alternativas, este sería el momento de la elección de la mejor de las alternativas (o de desestimar el proyecto por sus altos impactos). Si no existen alternativas tendremos que ponderar los impactos dentro de la alternativa que se nos plantea. El paso siguiente consiste en establecer medidas correctoras (en este proceso hay que tener siempre en cuenta el Principio de Precaución, es decir, siempre es mejor no causar el impacto y no tener que corregirlo, que causarlo y tener que invertir en medidas correctoras).

    La siguiente fase consiste en un Plan de seguimiento de las medidas correctoras y de potenciales nuevos impactos que pudieran surgir (desviaciones de nuestros análisis), así como una evaluación de los impactos residuales (tras la realización de la obra) y establecimiento de medidas correctoras para dichos impactos (aquí ya no cabe prevención, la cual tendría que haber estado determinada en el EIA anterior, que para eso sirve).

    También habría que seguir con detenimiento la fase de abandono y recuperación del proyecto (de la obra).

    Por último, es posible que surgiera la necesidad de la realización de estudios complementarios a raíz de la vigilancia establecida o con el objeto de elaborar un buen seguimiento del proyecto.

     Recogida de información

    Análisis proyecto

    Análisis de variables

    Identificación de acciones

    Identificación de elementos

    del proyecto susceptibles

    del medio susceptibles de

    de producir impactos

    cambio

    Inventario del medio

    Valoración del inventario

    Identificación y predicción

    de impactos

    ¿Existen alternativas?

    SI NO

    Ponderación de impactos Medidas correctoras

    y valoración

    Selección alternativa Impactos residuales

    Plan seguimiento

  3. Contenido de un EIA.

El contenido mínimo de un EIA se contempla en la legislación vigente (arts. 4, 5 y Anexo IV de la Directiva 85/337/CEE, así como su transposición a la legislación española).

Es por esto que podríamos definir un índice tipo para cualquier EIA, el cual podría constar de las siguientes partes:

 

 

 

 

DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO.

El proyecto es fundamental como fuente de datos para el EIA, debido a que en el mismo se contemplan todas las partes de la obra, y por tanto nos permite tener una idea clara de cada potencial impacto sobre el MA de ésta.

Los objetivos tendrán que ser evaluados tanto desde el punto de vista económico como social.

La justificación hace referencia a la verdadera necesidad del proyecto, así como a su posible superposición con otras iniciativas y su eficiencia y eficacia desde el punto de vista del cumplimiento de sus objetivos.

 Las acciones habrán de ser:

 

 

DEFINICIÓN DEL ÁMBITO.

En cuanto al término ámbito hay que recurrir a la legislación vigente, donde se define el ámbito de actuación como el de la "cuenca afectada", término no precisado, pero del cual se puede concluir que se establece un ámbito mayor que el área afectada directamente por el proyecto, aunque sea tan solo por analogía con el término cuenca hidrológica (que hace referencia a todos los puntos que vierten hacia un mismo río).

Es importante también diferenciar entre el ámbito físico y biológico y el ámbito socio-económico, puesto que las variables físicas podremos tomarlas a nuestra conveniencia si no existen datos previos, pero las variables socio-económicas son tomadas con una serie de criterios administrativos muy definidos que no siempre pueden coincidir con el ámbito de nuestro estudio.

Por otro lado, también habremos de tener en consideración las diferentes escalas del trabajo intentando estandarizar las variables que tomemos para nuestro ámbito de estudio. Es por ello que debemos tener en cuenta las escalas geográficas, de precisión, temporales (sobre todo teniendo en cuenta las diferencias entre la escala temporal del proyecto y la escala temporal de sucesión de hechos en la naturaleza), etc.

En general, los criterios para la identificación espacial y temporal del ámbito de un EIA son:

 INVENTARIO Y VALORACIÓN AMBIENTAL.

  1. INVENTARIO AMBIENTAL.

Definición y contenidos.

Esta tarea consiste en conocer el entorno afectado y entender su funcionamiento. De su elaboración correcta depende en gran medida la calidad del resto del EIA. Hay que seleccionar las variables adecuadas, inventariarlas, y hacer una síntesis y valoración de éstas. Como todo diagnóstico ha de contener:

Consideraciones y criterios previos.

Se emplearán toda clase de medios posibles, que comenzarán por una recopilación de la información existente (que habrá de ser analizada para determinar su calidad, tanto intrínseca, de los propios datos, como externa, si se orientan más o menos a nuestras necesidades) y que se habrán de complementar con visitas de campo, entrevistas a expertos y/o muestreos de las variables que pretendamos introducir en el inventario.

La escala del trabajo ha de ser más o menos estandarizada (en la medida de lo posible) y cartografiable. Lo ideal para todas las variables sería disponer de una misma escala para poder superponer unos elementos con otros. La escala de trabajo viene de algún modo determinada por el presupuesto y los plazos que tenemos para entregar el trabajo y para llevar a cabo el proyecto, aunque a veces es posible determinar éstos después de la selección de la escala.

Es importante que de este primer análisis detectemos los elementos y factores más delicados y significativos para el EIA a través de los medios ya mencionados.

Las variables del inventario ambiental.

La selección de las variables del inventario (que, no olvidemos, han de ser los factores más significativos y que pueden ser objeto de alteración debido al proyecto), ha de atender a las siguientes condiciones:

Ejemplos de variables ambientales significativas.

Síntesis del inventario.

No es posible trabajar con todas las variables, además de que sólo nos interesan las cuestiones de funcionamiento. El ejercicio de síntesis del inventario permite definir unidades homogéneas, tanto internamente como en la respuesta ante una determinada alteración. Para sintetizar el mejor método es realizar mapas temáticos.

Existen dos grandes enfoques para la síntesis:

 

 

 

 

  1. VALORACIÓN DEL INVENTARIO.

La valoración del inventario es un proceso que implica dar un grado de excelencia y/o mérito para ser conservado de un determinado elemento de dicho inventario. Se trata de descubrir el valor ecológico, paisajístico, productivo, científico, etc. de un determinado elemento. Los objetivos de este proceso son:

Los criterios de valoración más importantes son los siguientes:

 PREVISIÓN DE IMPACTOS.

La previsión de alteraciones ha de dejarnos bien claro qué impactos son notables frente a aquellos que son mínimos (criterio legislativo en esta clasificación). Ésta valoración se consigue mediante el cruce de los elementos del proyecto frente a los elementos que se verán afectados por el mismo en el medio natural.

Los impactos han de ser caracterizados (descritos), jerarquizados mediante un valor de gravedad del impacto sobre el MA y evaluados de modo global.

Los problemas que surgen son:

Para cuantificar de algún modo los impactos surgen los indicadores de impacto, los cuales han de ser:

Los indicadores de impacto pueden ser diseñados con dos enfoques:

 

METODOLOGÍA DE EVALUACIÓN DE IMPACTOS.

  1. Identificación de acciones del proyecto:
  2. - Que modifiquen los usos del suelo.

    - Que exploten los recursos naturales.

    - Que emitan contaminantes.

    - Que induzcan impactos secundarios.

    - Que induzcan riesgos naturales.

  3. Identificación de factores del MA susceptibles.
  4. - Indicadores de impacto.

    - Índices de estructura.

  5. Cruce entre acciones-factores y causa -efecto.
  6. Descripción de los impactos

 

Existen muchas formas de afrontar estos problemas de elección. Entra ellas destacan principalmente:

 

 

Técnica

Ventajas

Inconvenientes

Lista de contrastes (sobre una lista de posibles impactos elaborar una lista con los impactos que se pueden dar y los que no se darán).

Simplicidad.

Óptimo en estudios preliminares

Inducen a soslayar efectos no inducidos de modo intuitivo.

Redes de interacción (sobre una acción determinada del proyecto vemos a qué medio puede afectar y qué medios se pueden ver afectados de modo indirecto por esta afección).

Visualización de la conexión causa-efecto.

Complicación excesiva en grandes actuaciones. Posibles duplicidades.

Matrices de impactos.

(cruces en una tabla entre acciones de proyecto y elementos del medio)

Carácter sintético.

Datos cualitativos y cuantitativos.

Mucha subjetividad.

Carácter no selectivo.

 

Tabla 1.- Principales modelos de evaluación de impacto ambiental.

Existen cuatro tipos de matrices de impacto (que nosotros hayamos dado):

 

Acciones del proyecto

Recursos del MA que se pueden ver afectados por las acciones del proyecto.

·

·

´

·

´

´

´

´

·

Donde a cada símbolo se le dé un significado (impacto significativo, no significativo, etc.). También podemos ponerle números, y de esa manera cuantificar de algún modo los impactos.

Tiene la ventaja de que existen muy diversas versiones (flexibilidad metodológica) y que es muy simple de realizar (una vez se conocen bien las relaciones causa-efecto). Tiene el inconveniente de que no es posible incorporar una consideraciones dinámicas a la misma.

 

 

 

Tiene la ventaja de que muestra relaciones de dependencia entre diferentes impactos, pero tiene el problema de que precisa mayores conocimientos teóricos debido a su complejidad.

 

Elementos del MA que se pueden ver afectados por el proyecto

Acciones del proyecto que pueden causar impactos.

Acciones del proyecto cuyos impactos se pueden ver amplificados por otras acciones (interacciones entre acciones de proyecto).

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Que se puede complicar tantas veces como sea necesario.

Tiene la ventaja de que refleja secuencias temporales para cada una de las subfases y fases. El inconveniente es la especificidad que no permite tener una visión global muy clara.

Existen también las llamadas Matrices de Leopold (Leopold, 1971) -ver (1) en sus págs. 429-433), diseñadas a partir de la EIA de una mina de fosfatos de California. Consiste en un cuadro de doble entrada cuyas columnas están encabezadas por una amplia relación de factores ambientales (88) y cuyas entradas por filas están ocupadas por otra relación de acciones (100) causa de impacto; ambas listas de factores y acciones tienen carácter de listas de chequeo entre los que seleccionar los relevantes para cada caso; en este sentido conviene advertir de que su origen supone el peligro de ignorar aspectos que no siendo importantes allí puedan serlo en otros países. Cada casilla de la matriz se compone de dos eleentos:

La matriz no es propiamente un modelo para realizar EIA, sino una forma de sintetizar y visualizar los resultados de tales estudios; así la matriz de Leopold sólo tiene sentido cuando va acompañada de un inventario ambiental y de una explicación sobre los impactos identificados, de su valor, de las medidas para mitigarlos y del programa de seguimiento y control. En suma se trata de una matriz de relación causa-efecto que añade a su papel en la identificación de impactos la posibilidad de mostrar la estimación de su valor.

 

 

Para realizar este tipo de matrices es necesario definir los impactos y caracterizarlos. A la hora de caracterizar un impacto tenemos una serie de criterios legales muy definidos, y que son los siguientes:

 

Sobre esta caracterización cabe realizar una valoración de los impactos, teniendo en cuenta los criterios legislativos que figuran en la directiva y sus posteriores transposiciones a los estados miembros de la UE. La valoración se puede realizar con la siguiente clasificación:

Es difícil determinar la diferencia entre severo y crítico, sobre todo porque el ser recuperable o no por medidas correctoras depende del presupuesto que se maneje.

A la hora de valorar se utilizan diversas metodologías:

  1. Enjuiciamiento directo.
  2. Aspectos cualitativos. Criterios simples sobre características no cuantificables y que pueden definirse mejor empleando clases.
  3. Sistemas cuantitativos:

 

 

La gravedad de un impacto va a venir determinada por sus características magnitud (en cuanto a su intensidad y extensión). Hay que transformar esto en un valor de modo aproximativo. Para una concreción mayor existen fórmulas para asignar valores simples a los descriptores o características de los impactos para llegar a un valor estandarizado de todos los impactos.

(E) Extensión (puntual o amplia, con valores de 1,3,5).

(D) Distribución (puntual o continua, con valores de 1 y 0.5).

(O) Oportunidad (oportunas o inoportunas, con valores de 1 y 2).

(T) Temporalidad (Infrecuente, frecuente y permanente, con valores de 0.5, 1 y 2). (R) Reversibilidad (reversible e irreversible, con valores de 1 y 2).

(S) Signo (+ ó -).

(M) Magnitud (baja, media, alta, con valores de 1,3,5).

Con estos valores calculamos el Índice Total de Impacto (IT), que tiene la siguiente fórmula:

 

IT= [(M*T+ O) + (E*D)]*R*S

 

Que se valora de la siguiente manera:

30-50 Crítico.

15-30 Severo.

5-15 Moderado.

< 5 Compatible.

Éste sería el impacto sin las medidas correctoras, tras la aplicación de las medidas correctoras (que se restarían, -MC). Se trata de un análisis cuantitativo para luego llegar a un valor semicuantitativo.

MÉTODO DE BATELLE-COLUMBUS.

Se tiene aquí una especie de cuestionario, dividido en diferentes elementos que se dividen en subcajas con muchos elementos en su interior a los que se dan unos valores.

Pondera los diferentes elementos del medio para llegar a un impacto global. A cada elemento se le da un peso consultando a un panel de expertos para un caso muy concreto (Método Delphi). Este método se ideó para obras hidráulicas (ponderaciones hechas para este tipo de obras). Por tanto, si se modifica el proyecto, las ponderaciones han de ser diferentes.

El siguiente paso es dar un número a cada uno de los elementos. Valor 1 calidad ambiental máxima posible, valor 0 es la calidad ambiental intolerable.

Se valora el impacto ambiental con proyecto, sin proyecto, cambio neto y hay una cuarta columna con señales de alerta (para no diluir la gravedad de un impacto concreto).

Para dar estos valores hay que definir una función que permita relacionar la variable ambiental con los valores 0 ó 1 (calidad ambiental).

Calidad.

  1. X

Variable ambiental.

Calidad

0

 

X

Variable ambiental

 

Calidad

0 X

Variable ambiental

 

 

 

Para cada impacto que se produce se suele rellenar una ficha con los siguientes datos:

  1. Acciones del proyecto que lo producen.
  2. Localización.
  3. Descripción de la alteración.
  4. Caracterización.
  5. Impacto: compatible, severo, crítico, etc.
  6. Indicadores: que permitan medir el impacto durante la fase de seguimiento.
  7. Relación con otras alteraciones.

 

MEDIDAS CORRECTORAS.

Se trata de medidas que se hacen sobre el proyecto con el objeto de (1):

Las medidas correctoras no deben constituirse en coartada para la aceptación de cualquier proyecto, en la idea de que los impactos van a obviarse con la medida correctora. SIEMPRE ES PREFERIBLE EVITAR EL IMPACTO QUE CORREGIRLO.

Según determinados criterios, podemos tener los siguientes tipos de medidas correctoras (que pueden darse tanto en la fase de construcción, explotación y/o abandono):

De estos tipos de medidas podemos sugerir los siguientes instrumentos de actuación:

Un aspecto muy importante de las medidas correctoras es el coste de las mismas, ya que dicho coste no es marginal respecto al de la obra sustantiva y puede producir fuertes anomalías, por lo que es importante considerarlo lo antes posible. Pero no sólo es importante tener en cuenta la viabilidad desde el punto de vista económico sino también la técnica, económica, eficacia (reducir el impacto)/eficiencia (coste/impacto), facilidad de implantación y mantenimiento y control (dado que normalmente las medidas una vez implantadas se abandonan).

Las medidas correctoras han de especificar, como mínimo, los siguientes aspectos:

 

 

PLAN DE SEGUIMIENTO Y VIGILANCIA.

El Programa de Vigilancia Ambiental debe entenderse como el conjunto de criterios de carácter técnico que, en base a la predicción realizada sobre los efectos ambientales del proyecto, permitirá realizar a la Administración un seguimiento eficaz y sistemático tanto del cumplimiento de lo estipulado en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), como de aquellas otras alteraciones de difícil previsión que pudieran aparecer (2).

Presenta una doble vertiente, representa un contrato del promotor con la Administración que le obliga a llevar a cabo lo dicho en el estudio de impacto ambiental y le hace responsable. La Administración no se hace cargo de las medidas correctoras ni del Plan pero atenderá a los informes derivados del plan de seguimiento.

Por tanto, los objetivos de dicho plan podrían enumerarse como sigue:

 

Para cada medida correctora habremos de elaborar una ficha con unas características mínimas:

Dentro del Plan no sólo hay que analizar la medida correctora sino su influencia en elementos adyacentes para descubrir posibles sistemas afectados. Hay que hacer uso de indicadores representativos, fiables y relevantes de la influencia en el sistema, así como fáciles de medir y de número reducido.

En la interpretación de los resultados hay que tener en cuenta:

La retroalimentación consiste en la reconsideración de objetivos, si no ha habido efectos se puede decidir eliminar actividades del plan de seguimiento, para reducir costes, o se pueden incluir revisiones para impactos no previstos. Debe existir cierta flexibilidad pero con compromiso, hay que trabajar con los objetivos.

ANÁLISIS SEGÚN ELEMENTOS DEL MEDIO FÍSICO.

 

EL CLIMA.

Pocos proyectos lo afectan, sólo grandes presas en zonas de clima árido. Ej: Asuán.

TEMPERATURA.

PRECIPITACIONES.

BALANCE HÍDRICO (ETP según Thornwaite y Pennman).

VIENTOS (Dirección, velocidad, calmas).

CLASIFICACIONES CLIMÁTICAS (Thornwaite, Papadakis, Emberger, Allué, etc. vistos en Climatología).

CLIMOGRAMAS.

OTROS (inversiones térmicas, capacidad dispersante, confort climático, zonas sensibles, niveles de ruido nocturnos-diurnos, fuentes de ruido, etc.).

 

 GEOLOGÍA Y GEOMORFOLOGÍA.

LITOLOGÍA.

GEOMORFOLOGÍA.

CARTOGRAFÍA.

 

EL SUELO.

Los estudios están basados en productividad y pérdida de suelos (por erosión o pérdida de nutrientes). Todo proyecto genera una pérdida del suelo, por ocupación del terreno y actuaciones asociadas.

HIDROLOGÍA.

HIDROLOGÍA SUPERFICIAL.

HIDROLOGÍA SUBTERRÁNEA.

CARTOGRAFÍA.

 

 

 

VEGETACIÓN.

Las plantas tienen gran importancia como recurso, las cualidades que las hacen objetivo de protección son:

Dado que son organismos estáticos cualquier actuación sobre ellos adquiere una importancia excepcional.

OBJETIVO

TAREAS

MATERIALES/MÉTODOS

  1. Conocimiento de la situación previa

Delimitar el ámbito de la actuación.

Caracterización del medio

Inventario de especies y comunidades (censo y valoración).

Cartografía

Fotografías aéreas

Estudios de flora

Estudios de factores del medio

Trabajo de síntesis en el despacho para preparar el trabajo de campo

Criterios valoración

  • Definición de impactos
  • Alteraciones

    Tipificación de impactos

    Indicadores de impacto

    Proyecto

  • Medidas correctoras
  • Minimizar los daños.

    Proponer medidas de restauración de la cubierta vegetal.

    Diseño de la obra

    Seleccionar plantas y métodos apropiados para la restauración.

     

    Consta de tres fases:

    Posteriormente, y con esta información se procede a una Catalogación de las comunidades y de la flora existente (área, nombre, riqueza florística, estado de evolución y/o conservación). El siguiente paso es la Valoración de las comunidades vegetales en base a unos criterios definidos anteriormente:

    Por último se realiza una cartografía de la vegetación y una valoración de la flora. Para ello se realiza un catálogo florístico (alfabético o sistemático) y se valora de forma clara respecto a los siguientes criterios:

    1. Riqueza y diversidad florística: la riqueza se expresa por el nº de táxones por unidad de superficie, no es muy indicativo de la importancia dado que un cultivo puede presentar una gran riqueza mientras que el desierto de Almería la tiene muy baja. La diversidad mide el nº de táxones de rango superior representados en la zona (familias, órdenes), por sí sola no dice nada.
    2. Fragilidad: presencia de especies sensibles a las alteraciones del medio (fundamentalmente antrópicas), son por ejemplo especies en un extremo de su área de distribución o con adaptaciones muy especiales. Son útiles las listas rojas de especies amenazadas.
    3. Representatividad: engloba valores pedagógicos, científicos y socieconómicos de las plantas.
    4. Singularidad: presencia de especies originales, raras en el ámbito territorial más alto que se pueda considerar. Viene condicionada por la distribución de las especies. A la hora de evaluar la especie hay que tener en cuenta la ecología y el área de distribución (elementos de amplia dispersión, eurosiberianos, mediterráneos, paleotropicales, xero-pangeicos o endémicos).

    Directos: producidos por la ejecución de la obra, son inherentes a cualquier actuación.

    Indirectos: producidas por la explotación de la obra, dependen del tipo de actuación que se lleve a cabo.

    EL PAISAJE.

     

    1. Características intrínsecas del punto: hay que tener en cuenta la integración de sus componentes y la belleza de cada uno de ellos. Se definirán valores en función de las formaciones del relieve, la vegetación, la presencia de agua y la presencia de elementos culturales.
    2. Vista directa del entorno inmediato: el entorno inmediato se considera el área comprendida entre 500-700 metros del punto de observación. También hay que tener en cuenta la integración de los distintos componentes, si forman un conjunto armonioso.
    3. Horizonte visual o fondo escénico: vistas panorámicas, amplitud de miras desde el lugar. Cuanto mayor sea la amplitud, mayor será el valor estético, aunque dependiendo de la calidad de los elementos anteriormente nombrados.

    Se trata de elementos muy difíciles de objetivar, por lo que se evalúa lo que se ve intentando ponerse en el lugar del sentimiento colectivo. Suele haber un acuerdo general al menos sobre los extremos, aunque menos sobre los niveles medios.

    1. Biofísicos: derivados de los componentes característicos del campo, existencia de contrastes climáticos, estacionalidad de la vegetación, variedad cromática, orientación del paisaje (efectos de contraluz) ...
    2. De visualización (morfológicos): son derivados de la configuración del entorno de cada punto de la cuenca, magnitud, forma y complejidad de la cuenca visual.
    3. Histórico - culturales: son derivados de los procesos históricos que han producido la realidad que se está apreciando. Pueden determinar la compatibilidad o no de una actuación.

    Factores biofísicos:

    Vegetación: produce un efecto pantalla. ­ Densidad, altura, diversidad de estratos, contraste cromático, ¯ estacionalidad - ¯ fragilidad.

    Relación suelo – vegetación: cuanto más contraste haya entre el tono del suelo y la vegetación más frágil será el paisaje.

    Orografía: las pendientes bajas absorben más los impactos y las pendientes altas los realzan, aunque depende mucho del tipo de actuación.

    Orientación dominante: aquellas que tienen mayor iluminación o que obligan a una observación a contraluz tienen una mayor fragilidad.

    Factores morfológicos: tienen una relación estrecha con la configuración del entorno donde se va a producir la actuación.

    Tamaño de la cuenca visual: cuanto mayor es la cuenca visual más visible es un punto y más frágil es.

    Compacidad de la cuenca: una cuenca es compacta cuando no existen en ella "lagunas visuales", es decir huecos que no se ven; por tanto es más frágil.

    Forma de la cuenca: las alargadas son más frágiles porque orientan la vista, la direccionan hacia un determinado punto.

    Altura relativa del punto respecto de la cuenca: son más frágiles los puntos que están muy por encima o muy por debajo de la cuenca visual.

    Factores histórico – culturales: son aquellos relacionados fundamentalmente con puntos o zonas singulares desde el punto de vista histórico o cultural (únicos, de valor tradicional o interés patrimonial).